En nuestra selva eterna
llena de frutos, árboles,
y con todas sus flores tiernas.
Nuestro refugio pulmonar hoy grita
nuestro hogar está en llamas
y nuestros corazones heridos.
Miro el fuego rojo Destructor,
6.7 millones de kilómetros de
sagrada vegetación.
Respirando me doy cuenta,
nuestros pulmones han perdido el 20 por ciento
del oxígeno planetario.
El fuego ambicioso yacía
en las mentes de ellos:
caballeros, títeres y payasos
de Don Dinero.
Responsables de la puntillosa situación
de los 30 millones de habitantes,
del hábitat de los guardianes de la eternidad verde.
Protectores mágicos del capinuri, del jaguar,
del río, canal de sabiduría ancestral,
amenazados por el progreso occidental.
Por ellos, ciegos por el fuego ambicioso del poder latifundista,
del agricultivo intensivo, irrespetuoso, agresivo.
Ellos, que acusaban al indígena de ser
“ciudadanos de segunda categoría”*
decían de ellos que no tienen
cultura, ni dinero, ni lenguaje**
Aquellos pueblos hermanos del silencio de las aves,
sapos y manantiales
necesitan ayuda.
Porque la materia prima no se vende, se protege
Y mi corazón rabioso acusa las verdaderas prácticas de segunda categoría:
1) Silenciar a los pueblos indígenas
2) Priorizar la agricultura y la ganadería extensiva e irrespetuosa para el ecosistema
3) La extracción y exportación occidental de monocultivos que marchitan la magia verde amazónica
Sabemos que nuestros corazones tienen que apagar varios incendios
nuestros corazones
encienden el amor, el cambio.
Escuchando, reciclando, respetando, donando
Seremos la lluvia tropical que sana
Ya que no somos ciudadanos de segunda categoría
Somos guerreros del planeta tierra.
* Alan García, ex presidente del Perú, 2008.
** Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, 2019.
¿Cómo ayudar?
Puedes difundir la información y donar dinero a las siguientes organizaciones para ayudar a la reforestación del Amazonas.